Para activar facilitar y potenciar la conexión con estos seres de luz, ten cuenta:
Deséalo: abre tu vida corazón entendimiento y mundo a los ángeles.
Educa tu mente: aprende a dejar el bullicio mental y a centrarte en sentir; permítete un momento contigo hasta que acallar la mente se convierta en un hábito; al lograrlo, las señales se percibirán fácilmente y tu capacidad intuitiva será cada vez mayor.
Se constante: al principio quizá no percibas a los arcángeles tan rápido y claro como esperas. Este es un ejercicio que demanda atención práctica. Invoca su presencia constantemente agudizando tus sentidos y pronto empezarás a ver los resultados.
Relájate: recuerda la regla de pedir, soltar y confiar. Deja que los ángeles y el Creador actúen.
Se responsable: debes ser consciente de lo que pides; recuerda que ante todo siempre debe primar el beneficio mayor para todos los involucrados, así no se cumpla lo que deseas. Responsabililízate también sobre tus decisiones y elecciones.
Agradece: el mayor reconocimiento y la mejor manera de retribuir a los ángeles y al Creador es por medio de la gratitud. Ten presente que una vez que pides su asistencia, ellos empiezan a trabajar.
Con amor.
Abrazos
Paulina L.